Crucificados junto con Él
- Oramosportioficial
- 10 ago 2020
- 2 Min. de lectura
ESCUCHA:
Romanos 6:4
Porque somos sepultados juntamente con él para muerte por el bautismo, a fin de que como Cristo resucitó de los muertos por la gloria del Padre, así también nosotros andemos en vida nueva.
PIENSA:
¿Ya estas crucificado con él?
Cuando recibimos a Jesús en nuestro corazón, tu vida es totalmente renovada, ya que su sangre nos lava y purifica limpiándonos de todo pecado y haciéndonos unas nuevas criaturas
2 corintios 5:17
De modo que, si alguno está en Cristo, nueva criatura es; las cosas viejas pasaron; he aquí todas son hechas nuevas.
Cuando hablamos de crucificados con el, a que se refiere esto:
1. Revivir a una nueva vida: en Juan 3:3, la palabra de Dios nos relata como Jesús le enseña a Nicodemo acerca de la necesidad de nacer de nuevo, al nacer de nuevo en Cristo Jesús podemos poseer otra vez nuestra verdadera identidad, aquella que fue corrompida desde el inicio de los tiempos cuando el pecado entro a la humanidad, y que satanás procura arrebatarte día a día.
2. Estar unidos a Cristo: se refiere a ser uno solo con él, en mismo carácter y propósitos.
3. Morir y ser libres de la naturaleza pecaminosa: Romanos 6:6 nos enseña que cuando Jesús murió en la cruz nos hizo libres, por medio de el podemos ir al padre y ya no pertenecemos a la naturaleza pecaminosa, no somos esclavos del pecado.
4. Negarnos a nosotros mismos: Mateo 16: 24 Jesús dice que aquel que quiera seguirle debe negarse así mismo, esto nos habla de negarnos a satisfacer nuestra propia naturaleza carnal y deseos, por permitir que se cumpla su propósito en nuestras vidas sin importar lo que cueste
5. Mantener vivo a Cristo en nosotros: Romanos 6 :15-16 nos muestra como hemos revivido junto con él, y para mantener vivos con el debemos santificarnos día a día viviendo vidas que lo honren.
Y vuelve de nuevo la pregunta ¿ya estas crucificado?
ORA:
Señor Jesús, hoy quiero morir a todo aquello que me lleva a estar lejos de ti, hoy quiero revivir, estar unido, negarme, para así mantenerme vivo en ti.
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