La Obediencia
- Oramosportioficial
- 30 jul 2020
- 2 Min. de lectura
ESCUCHA:
Mateo 7:24-27
24 Cualquiera, pues, que me oye estas palabras, y las hace, le compararé a un hombre prudente, que edificó su casa sobre la roca. 25 Descendió lluvia, y vinieron ríos, y soplaron vientos, y golpearon contra aquella casa; y no cayó, porque estaba fundada sobre la roca. 26 Pero cualquiera que me oye estas palabras y no las hace, le compararé a un hombre insensato, que edificó su casa sobre la arena; 27 y descendió lluvia, y vinieron ríos, y soplaron vientos, y dieron con ímpetu contra aquella casa; y cayó, y fue grande su ruina.
PIENSA:
¿Qué pasa cuando es aplicada?
Mis decisiones son las que denotan que tan obediente soy, a pesar de (que lo deseado sea algo diferente a lo que debo hacer) Cuando ellas no son tomadas basándome en mi propia opinión si no conforme a la voluntad de Dios, son evidentes las consecuencias de dichas decisiones.
El texto nos habla de una promesa guardada en un acto de obediencia, Jesús nos ensaña que siempre tenemos opciones, pero mi decisión hará que esa opción que tome sea para bendición, lamentación y o muerte.
La obediencia me lleva a ser fuerte, firme, estar de pie en la roca; pero debo aprender a escuchar la fuente que me brinda las instrucciones, a reconocer la voz que me ofrece la sabiduría para no fracasar. (Mat 7:24 a) nos dice: “Cualquiera, pues, que me oye estas palabras, y las hace” por ello buscar la dirección por medio de palabra de Dios es la decisión correcta y única que nos llevará a conocer el propósito de Dios para nuestras vidas.
La promesa es clara, (Mat 7:25) Descendió lluvia, y vinieron ríos, y soplaron vientos, y golpearon contra aquella casa; y no cayó, porque estaba fundada sobre la roca. La obediencia me guarda en medio de todo lo que se pueda presentar, lluvias, ríos, vientos (Pruebas o dificultades) más la maldad y el pecado me conducen a la ruina, donde nada ni nadie me pueden ayudar.
ORA:
Señor Jesús, hoy decido ser completamente obediente a tu palabra, quiero rendir mi vida completamente a tu voluntad y así ver tus planes cumpliéndose en mi vida.
Amen!