Somos Ovejas
- Oramosportioficial
- 21 ene 2021
- 2 Min. de lectura
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Salmos 23:1-3
Jehová es mi pastor; nada me faltará. En lugares de delicados pastos me hará descansar; Junto a aguas de reposo me pastoreará. Confortará mi alma; Me guiará por sendas de justicia por amor de su nombre.
PIENSA
Sabías que‼ Una vez que el cordero ha nacido, es extremadamente vulnerable y para él, el calostro de su madre será un verdadero elixir de la vida. Por eso, si ésta no pudiera amamantarlo, habrá que buscarle urgentemente una nodriza. Su supervivencia depende de ello. Mientras los corderos se alimentan sólo de la leche de sus madres reciben el nombre de lechal, después pasan a comer piensos naturales y más adelante ya salen a pastar por los campos.
Además de esta dieta, las ovejas necesitan sal. Bueno, realmente lo que les aporta la sal son sus minerales. Las ovejas y corderos la necesitan para no deshidratarse, para favorecer la digestión y además conseguir una correcta asimilación de nutrientes. El problema es que no ingieren la cantidad necesaria de minerales para su crecimiento, desarrollo y reproducción sólo con su dieta. Por esta razón los pastores proporcionan a las ovejas, bloques de sal que ellas lamen tranquilamente.
Es totalmente sorprendente como tenemos un gran parecido a las ovejas, y así logramos comprender un poco más a fondo la forma en la que el salmista expresa su dependencia total de Dios.
Así como las ovejas son vulnerables y necesitan su madre, después del cuidado de su pastor y hasta de la protección del rebaño, así mismo nosotros somos tan vulnerables desde el primer momento de nuestro nacimiento, durante toda nuestra vida vulnerable y en cierto punto frágil es la que nos lleva a depender de Dios y no solo a depender por una necesidad física, sino, También porque nuestro espíritu y alma necesitan del sustento divino que solo Dios nos puede dar.
Solo Dios puede sustentarnos de la forma correcta, es él, quien sabe correctamente qué cosas son necesarias y cuáles son perjudiciales para nuestras vida, y esto nos lleva hoy a entender que así como las ovejas dependen de su madre y después de su pastor y rebaño así mismo nosotros necesitamos de la presencia de Dios día a día, necesitamos de nuestros familiares y amigos.
ORA
Padre celestial ayúdame a comprender que no fui creado para ser independiente, sino que me creaste vulnerable y frágil para así depender de ti siempre, hoy te pido señor que quites todo orgullo y altivez que me hacía creer independiente para así acercarme a ti y rendirme a tu cuidado. Amén y amén
Amen!